Desde que fue domesticado, el perro ha sido considerado el mejor amigo del hombre. Se dice que es fiel, leal y fiable y que no conoce la traición ni el engaño. Todo esto también puede decirse del perro del zodiaco chino. El perro siempre está dispuesto a defender una causa buena y justa. Si olfatea una injusticia en algún lugar, se vuelve realmente mordaz y no descansa hasta que se vuelve a hacer justicia. En general, está allí donde se necesita ayuda, ya sea en catástrofes naturales o en conflictos sociales. Su voluntad de sacrificio tiene algo del heroísmo de los grandes luchadores. Es menos versado en los modales de la alta sociedad. Siempre es franco y puede proferir las mayores groserías con cara inocente. Su amor por la verdad a menudo le ofende porque la dice en el momento equivocado. Aunque es muy culto y educado, su conversación no puede calificarse de refinada. Sin embargo, lo que dice con sus sencillas palabras tiene mucha sustancia. Su estilo de vida es más bien modesto. Puede prescindir de comodidades y lujos. Le interesan más las ideas filosóficas que el dinero. De vez en cuando le invade el abatimiento, el desaliento y una tendencia al nihilismo. Entonces se pone a la defensiva y no deja que nadie se le acerque. Pero, afortunadamente, está dotado de un fuerte instinto de conservación y siempre se apoya en sus cuatro patas.
El perro y su salud
Físicamente, los perros son fuertes y están en forma. Pero su psique está un poco resquebrajada. Esto se debe a que sus ojos negros a veces pueden desembocar en una depresión grave. Se recuperan rápidamente, pero eso pasa factura a su energía vital y a su salud.
El perro y el trabajo
Aunque le gusta trabajar de forma fiable, no tiene ambiciones ni deseos de ascender en su carrera. Le basta con tener la sensación de estar haciendo algo significativo. El trabajo debe gustarle. Encontrará su plenitud en el ámbito social, que es donde reside su mayor talento. El perro también puede ser un buen gestor industrial, un sindicalista activo, un jurista, un sacerdote o un educador. Pero sea cual sea la profesión que adopte, lo hará con mucho idealismo.
El perro y el amor
En el amor, el perro siempre se comporta de forma justa y sincera. No juega con los sentimientos de los demás. Pero, por desgracia, a menudo se siente decepcionado, porque no todo el mundo aprecia su honestidad. El perro puede ser feliz con el caballo. Le deja tomar las decisiones más importantes, pero mantiene su independencia. Con el tigre a su lado, el perro puede vivir grandes aventuras. Pueden luchar codo con codo por la justicia. El perro puede llevar una vida verdaderamente pacífica con el conejo. El dragón es demasiado orgulloso para soportar el espíritu crítico y el cinismo del perro. Y el perro piensa que la cabra es superficial. Además, no soporta sus caprichos.