El cerdo es el duodécimo y, por tanto, el último signo del zodíaco chino. Quizá por eso se le han dotado de tantas cualidades virtuosas, ya sea por comodidad o simplemente porque un animal u otro no ha recibido ninguna de ellas. Es su bondad casi ilimitada lo que hace que el Cerdo sea tan adorable. Es totalmente confiado y no conoce segundas intenciones maliciosas. Por eso está predestinado a ser víctima de todo tipo de bromas. Pero no se toma sus desgracias como algo especialmente trágico y perdona rápidamente. El destino tiene buenas intenciones para el cerdo, porque rara vez su ingenuidad tiene consecuencias realmente malas. Es una criatura pacífica y amistosa que no hace daño a nadie. Pero a pesar de su buena naturaleza, el cerdo se enfada mucho si le haces daño de forma malintencionada. Entonces se enfada de verdad y contraataca resoplando de rabia. El Cerdo valora una vida tranquila y cómoda por encima de todo y es muy aficionado a los placeres de esta tierra. Según el lema "vive y deja vivir", pasa sus días contento y lleno de optimismo. Le encanta la compañía alegre, la buena comida y bebida, y no pocas veces se inclina por el libertinaje. Como no reprende ni critica a los demás, tiene muchos amigos a su alrededor. Se le tiene en gran estima porque siempre está dispuesto a ayudar a los demás, ya sea con buenos consejos o con dinero. Tiene una gran sed de conocimiento y lee todo lo que cae en sus manos. Por ello, suele ser muy culto y elocuente.
El cerdo y su salud
El placer es el propósito de los cerdos en la vida. Siempre comerán bien, beberán bien y engordarán. Y como también son demasiado perezosos y letárgicos para hacer ejercicio, es probable que algún día tengan que pagar una gran factura médica.
El cerdo y el trabajo
Por muy trabajador que sea, el cerdo tendrá éxito en casi cualquier profesión. Como empresario independiente, sin embargo, se quedará en el camino, porque es ajeno a cualquier sentido de la competencia. Es demasiado honesto para poder imponerse a un oponente astuto. El Cerdo es capaz de ejercer todas las profesiones. Debido a su sensibilidad, a veces también tiene éxito en los campos artísticos. El Cerdo siempre encuentra lo que necesita para vivir. Consigue trabajo o dinero sin tener que hacer un esfuerzo especial.
El cerdo y el amor
En asuntos del corazón, los cerdos tienden a ser exuberantes. A menudo se precipitan en aventuras amorosas que no siempre tienen un final feliz. Entonces estalla la gran tristeza... hasta el siguiente flirteo. La pareja ideal para el cerdo es el conejo. En esta relación no hay peleas ni largas discusiones, que el cerdo odia. No debe liarse con la serpiente, porque ésta pronto degradaría al cerdo a esclavo. La cabra también se aprovecharía del buen carácter del cerdo.