Se podría decir que la cabra es el signo zodiacal del arte, ya que está abundantemente representada en la literatura, la música y la pintura. Artistas famosos como Miguel Ángel, Franz Liszt y Joachim Ringelnatz eran cabras, por citar sólo algunos. La cabra es una criatura imaginativa, creativa y sensible que, sin embargo, puede complicar la vida a sus congéneres con sus caprichos y cabriolas idiosincrásicas. Pero también sabe agradar y hacerse popular. Y como es una criatura amistosa, amable y servicial, no le resulta difícil ganarse a los demás. Por fuera suele parecer tranquila y equilibrada, pero por dentro es insegura, ansiosa y pesimista. A menudo busca un hombro en el que apoyarse, porque sola se siente bastante perdida. Si nadie le tiende la mano, apenas es capaz de hacerse valer a pesar de sus muchos talentos: le falta técnica con los codos. Aunque suele tener un objetivo claro en mente, en cierto modo es una soñadora ajena al mundo que no quiere conocer la cruda realidad. No es raro que sufra depresión y hastío del mundo. Una cabra sólo puede desarrollarse realmente cuando pasta en pastos gordos. Necesita seguridad económica para poder desarrollar sus dones y talentos innatos. Como vive con el miedo constante a la pobreza y la miseria, a menudo se hace dependiente de la gente rica. A veces vive con parientes ricos toda su vida o busca un cónyuge económicamente fuerte. Sabe muy bien que puede quedarse sola fácilmente.
La cabra y su salud
Sean fingidos o reales, los ataques de migraña son habituales entre las cabras. Hablan mucho de su frágil salud porque esperan que la gente les muestre más consideración si lo hacen. En realidad, son hipocondríacos que suelen ser bastante resistentes y envejecen como una roca.
La cabra y el trabajo
Si los talentos de la Cabra no son suficientes para una profesión artística, le irá bastante bien el trabajo técnico, donde puede demostrar su inteligencia y habilidad. Sin embargo, difícilmente llegará a la planta ejecutiva, porque carece de asertividad para ello.
La cabra y el amor
A menudo, la cabra necesitada de afecto no sabe exactamente si se trata del gran amor o de la protección que le ofrece su pareja. En cualquier caso, necesita mucha atención y cuidados para ser feliz en una relación. Si la cabra conecta con un conejo, un cerdo o un caballo, todo irá bien. A la liebre le divierten sus caprichos, el cerdo se limita a tolerarla y el caballo no la toma en serio. Ningún otro animal puede soportar mucho tiempo los caprichos de la cabra, especialmente el búfalo. La unión entre la cabra y el perro también suele estar condenada al fracaso. Estos dos pesimistas vivirían en permanente discordia consigo mismos y con el mundo.